Ya les hemos comentado en otro post, sobre qué es el autismo, una condición de salud que afecta a niños y que no es superable, aunque hoy en día existe el aprendizaje y la educación especial para tratar la enfermedad dependiendo de la severidad del problema. Se detecta a los primeros meses de edad en los pequeños y es más que evidente a medida que crecen por la falta de desarrollo intelectual y la orientación a la soledad y algunas conductas agresivas.
Los síntomas del autismo que se observan en los niños suelen ser:
Escaso lenguaje o pérdida del mismo.
Repetición de los mismos vocablos de manera constante.
No escucha al sustraerse del entorno pero algunos sonidos parecen alterarle.
Evade la mirada de los demás y la misma parece siempre pérdida.
Se torna obsesivo con algunos objetos de manera incomprensible.
Inadecuado uso de los juguetes y en muchos casos desinterés total por ellos.
Se concentra en alinear objetos por prolongadas ocasiones.
No muestra deseo de socializar y busca siempre la soledad.
Desconoce su nombre o parece no responder al mismo.
Rebeldía permanente porque no sigue instrucciones.
No se expresa para pedir algo sino que dirige la mano de la persona a quien lo pide, tal como haría alguien con incapacidad para hablar.
Tiene miedo al contacto físico y si ocurre puede alterarse violentamente.
Un aleteo de las manos simulando volar de manera constante.
Permanece durante mucho tiempo meciéndose.
Camina siempre de puntillas, y se pierde fijando la mirada en un punto durante horas.
Su actitud va de muy activo a totalmente pasivo sorpresivamente.
La agresividad es un problema constante ya sea con su entorno o consigo mismo.
Se altera con los cambios, y se empeña en un orden establecido.
Su violencia se desata sino logra obtener algo y pueden prolongarse.
Lo mismo que resulta evasivo parece por momentos estar feliz y reir sin motivo alguno.
Los niños con autismo rara vez superan el problema, debido sobretodo al aislamiento en que se empeñan en vivir, lo dificulta la educación especial que demandan. En muchos casos el autismo es parte de otras condiciones como el Síndrome de Down. Eso no impide que desarrollen algunas capacidades y que aunque no exista cura para llegar a ellos, se abandone la lucha de recuperar a los niños que viven en la soledad del autismo.
Imagen: Resiliencia y discapacidad
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