Si realizas un trabajo en el que permanecer sentado es la rutina, debes tener en cuenta que la espalda se recarga y demanda un poco de movimiento, para ello debes planear tus tareas de modo que cada hora puedas pararte y caminar, o estirarte, agacharte u ocuparte de otras tareas para así descansar la espalda. Escoge una silla que sea cómoda pero que tenga un refuerzo en la parte baja de la espalda porque ello ayudará.
Algunos zapatos con elevados tacos resultan en un dolor de espalda, y lo mismo sucede con los totalmente bajos, ambos pueden causarte malestar, por ello debes optar por tacos medianos y alternar entre días en altos y bajos para que tu espalda no se resienta.
No beber suficiente agua ya lo sabemos se convierte en muchos problemas de salud, así que mantente lo suficientemente hidratada y te sentirás mejor.
No levantes grandes pesos sin doblar las piernas, puedes causarte un daño muscular permanente. Si debes permanecer mucho tiempo parada, hazlo por momentos, camina un poco y luego para, eso hace que la espalda no se sobrecargue.
Al final del día es importante darse, si el dolor de espalda es algo que te aqueja por el trabajo que realizas una ducha con agua caliente mezclada con hojas de manzanilla, el efecto es una espalda menos dolorida. Y si eres de las que se ejercitan, hoy en día todas debemos ejercitarnos para sentirnos bien, aprovecha por hacer ejercicios para la espalda, te ayudará enormemente.
Si tu dolor de espalda es resultado de momentos de estrés, quizá es hora de tomarse la vida con más calma, hacer ejercicios de meditación, leer un libro, oir música relajante.
Siéntate bien como decían los abuelos, camina recta, usa un sostén adecuado.
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