El aumento de contagios entre mujeres jóvenes de Clamidia que se transmite vía sexual sexual, ya sea vaginal, oral o anal, ha llevado a los médicos a advertir la importancia de un control más drástico en las mujeres activas sexualmente que cambian constantemente de compañero sexual, porque hasta ahora el control anual parece ser no siempre suficiente para evitar las concecuencias de la enfermedad, infertilidad y enfermedad pélvica inflamatoria.
Un estudio realizado en el Reino Unido da cuenta que muchas mujeres que sufren la enfermedad, ignoran tal extremo y podrían de resultar embarazadas transmitir la enfermedad al feto. Pero también pueden dificultar el embarazo porque se presentan más casos de embarazo ectópico, las conclusiones son, ante el hecho de que muchas no presentan síntomas y la enfermedad puede estar ahí sin saberse, deben hacerse examinar cada vez que cambian de pareja, así detectar si tienen la enfermedad y recibir un tratamiento eficaz.
Este es un post informativo, el médico es el indicado para recomendar sobre condiciones de salud.
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